El virus del Ébola se detectó por primera vez en 1976 en la zona de Río Ébola, en la República Democrática del Congo (ex Zaire). Desde entonces, se provocan brotes con diferentes escalas.
El líder mundial en la evaluación de la salud del Ébola, dijo que el brote internacional de 2014 fue "el más mortífero nunca visto". El desafío es cada vez mayor: Luchar contra el virus del Ébola y tomar las máximas precauciones para evitar la propagación e infección. La tasa de mortalidad de la infección por el virus de Ébola es tan alta como 90%. No existe una vacuna contra el Ébola.
En este brote, la tasa de mortalidad fue derribada a 60% debido a la organización de la salud y la administración del agua contaminada, tiene casos positivos tratados de forma temprana.
La agencia de noticias de televisión estadounidense Fox News (31-7-2014) informó que fueron evacuados voluntarios en Liberia, Sierra Leona y Guinea. Liberia tiene 2 voluntarios extranjeros que están siendo monitoreados por sospecha de infección por el virus del Ébola.
La complejidad geográfica de la crisis actual pone de relieve uno de los obstáculos más importantes: La negativa de los infectados a presentarse.
Debido a que el Ébola se transmite por contacto físico directo, la contención exitosa se basa en el aislamiento de los pacientes de Ebola, y la cuarentena preventiva de cualquier persona con la que podrian haber entrado en contacto.
Por desgracia, en el brote actual, muchas personas con posibles síntomas han elegido como lugar de refugio sus familias o las comunidades locales donde corren el riesgo de los nuevos ciclos de transmisión del virus.
Los infectados por Ébola no dicen que tienen el virus porque temen llegar al hospital a morir, y morir solos, lejos de sus familias.
Otros se preocupan por el estigma que podría unir a ellos y a sus familias, que podrían perder sus puestos de trabajo, o regresar del hospital para encontrar su casa incendiada y sus pertenencias destruidas.Prevención de la propagación y el tratamiento máximo activo tan pronto como sea posible en los casos de infección, es la forma en que el mundo debe hacer frente a la epidemia mortal de Ébola.
Estados Unidos esta trabajando en fortalecer la educación sobre el virus Ébola para los médicos, así como directrices para las comunidades, para aprender a prevenir infección.
Las personas que vuelven de los países de África occidental durante estos meses del 2014, deberán ser estrechamente monitorizadas.
Cada semana se incluyen cientos de vuelos internacionales a partir de los 3 países con brote de Ébola.
El descubrimiento de los pasajeros infectados con el virus del Ébola en los aeropuertos o estaciones de ferrocarril, es extremadamente difícil, ya que la enfermedad tiene síntomas tempranos como muchas otras enfermedades.
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